En el proceso de compra la emoción es la que decide
Fidelización.
La emoción es la que decide.
Varios estudios aseguran que el 95% de las decisiones de compra proceden de nuestro subconsciente, lo que indica que la relación calidad-precio está abriendo paso a la conexión emocional que se establece entre el consumidor y la marca.
Ya no es tan significativa la razón lógica por la que elegimos un producto, como la experiencia que nos ofrece al adquirirlo, y es que debemos darle la importancia que se merece a las aportaciones que la empresa ofrece a la sociedad. Según un estudio reciente de IDC sobre 24.000 consumidores provenientes de 12 países, el 25% se anima a dejar un comentario en redes sociales, blogs o plataformas después de haber tenido experiencias positivas. La mayor parte de ese porcentaje repite la compra, aunque el servicio o producto obtenido no sea el más barato. En concreto, el 81% de las personas amplia los servicios que tiene con esa empresa si está le ofrece seguridad, confianza y empatía.
Las empresas ya no tienen que concentrar en vender, sino que tienen que conseguir que les compren, que les elijan. Esto solo se dará si el valor que aportas es superior al que aportan los demás.
Hemos llegado a un punto donde tener tal sobre abundancia informativa genera desinformación.
Todas las personas tenemos necesidades y al cabo del día necesitamos dar respuesta a miles de situaciones. Cuando buscamos una empresa de mudanzas, nos aparece un listado interminable. Cuando queremos buscar un restaurante cuesta mucho localizar uno que se adapte a tus gustos. Si necesitas un aparato electrónico determinado, dar con el modelo adecuado puede costarte mucho tiempo. Nos pasa lo mismo cuando nos encontramos mal y necesitamos ayuda en casa. Oferta hay mucha, ¿pero de confianza? al final la confianza y el tiempo está por encima de todo y es lo más difícil de encontrar.
El tiempo es lo más valioso que tenemos
Ese tiempo es lo más valioso que tenemos y perderlo es uno de los principales casos de estrés y de agobio al no encontrar aquello que necesitamos.
En Alares somos expertos en solucionar todas las problemáticas que cualquier persona puede tener en su día a día. ¿Y qué sucede cuando un cliente ve resueltas sus problemáticas? que es un cliente satisfecho y, por tanto, será fiel a nuestra marca.
Cuando una persona tiene cubiertas sus necesidades y una empresa consigue crear ese lazo emocional, es algo que no se puede romper. Y este lazo se consigue pensando en personas, no en clientes.
En Alares pensamos en personas. Personas que tienen necesidades, que tienen una familia y que se enfrentan cada día a problemáticas a las que muchas veces no llegan a dar respuesta.
¿Cómo lo hacemos?
Ofreciendo servicios que responden de manera real a lo que necesitan. Un Asistente Personal se encarga de localizar todo lo que el cliente necesite. Servicios de ayuda y cuidados en domicilio, u hospital. Medicamentos a domicilio. Gestiones administrativas. Consultas a abogados, médicos, nutricionistas o psicólogos. Segunda opinión medica internacional. Estos son solo algunos de los servicios que las empresas regalan a sus clientes. Y son servicios que no se pueden tocar como un objeto. Pero se pueden sentir. Y cuando llegas a las emociones de las personas y das respuesta a lo que necesita, como empresa marcas la diferencia.Y la diferencia que te diferencia de los demás es precisamente eso: marcar la diferencia.
Aún no hay comentarios